Zonas

Nuestro camino no es por fáciles prados de hierba, sino que es un sendero de montaña escarpado y lleno de dificultades. Pero siempre hacia adelante, hacia arriba, hacia el sol.
Ruth Westheimer


sábado, 15 de septiembre de 2012

URRIELLU. Via Pidal-Cainejo (V, V+)

Este año esta siendo grande, después de ascender el Mont-Blanc, la sudeste clásica del Midi.
Iba por primera vez en mi vida a zona de escalada mas mítica de España.
Después de vivaquear en Arenas de Cabrales, sobre las 10 de la mañana estamos preparando las pesadas mochilas,

en pocos minutos estamos en el collado de Pandevano, con las primeras vistas del Urriellu, que espectacularidad de lugar.


Bulnes se veía al final del valle, a este pueblecito solo se puede acceder andando o en el fonicular, situado en  la carretera de Sotres. Seguimos y ya observamos la vía que nos llevara a la cima de esta mole.

Unas tres horas mas tarde estábamos en la puerta del refugio.


Después de instalar  nuestros vivacs y comer un poco, decidimos ascender el pico del Oso, subimos hasta el collado de la Celada

 observamos la cara este del Urriellu, desde donde la mañana siguiente comezaremos el objetivo del finde semana

para minutos después enganchar la chimenea que asciende la cima de este piquillo.             
  Aunque sin subir por la chimenea que inicialmente queríamos ascender, subimos por la paralela,en donde no encontramos ningún signo de que nadie jamas la hubiese ascendido, nos dimos cuenta al realizar los rapeles desde la cima con algún clavo y algún cordino situados en la chimenea original.
 Tras un par de rapeles y un un descenso hasta el refugio, bastante tedioso para mis rodillas por el cansancio, llegamos al vivac,con impresionantes vistas del Picu , donde cenamos con algunos socios del Club alpino Madrileño.


A las 5:30 horas estábamos desayunando, para realizar  la escalada que llevó al marques Pedro Pidal y al pastor Gregorio Perez " El Cainejo" a la cima de esta emblemática cumbre en el año 1904. Tras una subida de una hora y media aproximadamente, nos encontrabamos ante la vía.

El primer largo es una travesía a derechas bastante fácil, con solo un pasito de travesía delicadillo, que nos lleva a la cueva, donde se encuentra la 1ª reunión, con dos clavos.

         
          




La 2ª reunión son las famosas llambrarinas, una placa bastante fácil, que nosotros abandonamos después de unos tres metros, donde Pele asciende en vertical unos metros para después realizar otra travesía a la derecha, donde encuentra la segunda reunión.

                 
 EL 3º largo es una travesía que se realiza andando sin ningún paso de dificultad que realizamos sin asegurar. Hasta el hombro desde donde se ve el refugio ya bastante abajo.



El 4º largo es donde empieza la chicha de la escalada. Desde el hombro no parece muy difícil e incluso pensamos en hacerlo en ensamble, aunque lo comienzo asegurado por el Pele, y a partir de  la reu  la cosa se pone bastante vertical, con  pasos no muy complicados IV+  pero bastante mantenidos aunque bien asegurados, con muchos clavos durante todo el largo.

                    
El 5º largo se lo da Pele, también bastante vertical  y con una dificultad mantenida de IV a V hasta la primera panza en la que hay q apretar de verdad (V+)  para sobrepasarla, para terminar en la siguiente  reunión

 un buen balcón donde se puede hacer un descanso para recuperar energía con preciosas vistas.
                                                 
El 6º largo es para mi, muy parecido al anterior con la panza de burra donde los dos aperturistas tuvieron que subirse uno en los hombros del otro, aunque nosotros la tenemos bien asegurada con un cordino(V+), se remonta por la parte derecha y enseguida topamos con dos clavos para aseguraral compañero.
                                                                                                                                                               Los siguientes 150 metros aproximadamente, los subimos en ensamble  primeros 100 m y cada uno con una cuerda hasta la cima.

Donde nos encontramos solos, un buen rato, hacemos unas  fotillos, una de ellas será  "mítica", jejej, ya os la pondremos.
El descenso, 3 rapeles, se hace un poco lento ya que nos encontramos con unos vascos, muy majetes, que al ser 5 tardan lo suyo en realizar cada uno de ellos.
Ya en  la base de este gran peñasco, nos llevamos un susto impresionante, al pasar muy cerca de nosotros un grupo de piedras arrojadas desde algún punto muy, pero que muy alto.

La bajada hasta el refu la realizamos con dos grandes, Pepe y  José Luis, que nos van informando de todas las vías por donde han subido.

Ya cenando en  Arenas de Cabrales quiero recordar a esa chica, "grande" que nos hizo pasar un rato de risas, que al igual que la escalada  no se olvidará facilmente.